EN ESTA NAVIDAD...NO TE COMPARES... NO VALE LA PENA.
Esta mañana caminando hacia mi oficina, disfrutaba las decoraciones navideñas, y me llamo especialmente la atención una ventana que tenia adherida en ella una litografía o afiche opaco con la imagen de un pesebre, entonces no pude evitar en ese momento, como no lo puedo hacer ahora, esbozar una sonrisa ante el recuerdo de las ventanas de la casa en la que crecí y en donde los adornos eran este tipo de afiches.
Mi memoria recupero las imágenes de aquella época donde me encantaba ver todas las ventanas de las casas del barrio con aquellas litografías. En casa de mis padres, a veces eran pocas a veces eran muchas, dependía de si lográbamos al finalizar la época navideña, desprender la cinta adhesiva de los afiches sin dañarlos, ya que seria la decoración del siguiente año.
Regresando a la mañana de hoy igualmente debo agregar que al lado de aquella casa cuya ventana la decoraba el solitario afiche, se encontraba otra con grandes decoraciones, luces, color, un contraste abrumador, bello en realidad, sin embargo, aquella imagen no arranco mi sonrisa ni toco mi corazón, ni mi espíritu navideño.
¿Saben por que? ....porque simplemente aquel recuerdo del afiche en la ventana, ya es mio, ya lo viví, aunque hoy a través de muchas y diferentes palabras se pueda criticar aquellas formas de decoración, fueron las mías, las que me alegraron como niña, las que disfrute, las que me hacían creer en el Niño Dios, las que compartí con mis padres y hermanos. NO PUEDO COMPARARLA con las de hoy. Si lo hiciera, dejaría en desventaja mi propio sentir, mi propia felicidad, mi propia experiencia, es un absurdo cuando las personas comparan esto con aquello, especialmente cuando comparan sus cualidades, sus experiencias de vida, sus sentimientos, sus VIDAS...OH POR DIOS!! sus vidas. Si deseas garantizarte un daño COMPARATE y si quieres garantizar que puedes hacer daño COMPARA un ser humano con otro.
Por ejemplo cuando se compara a un hijo con otro. Decirle porque este o aquel sobre sale mas, porque tiene mas atención, porque el otro o la otra no. El niño entiende estas palabras como desventaja. Comparar significa DEGRADAR a algo o alguien, poner por encima a alguien y disminuir al otro. Eso se puede hacer en la compra del mercado, compara las marcas, la calidad, los precios, pero a los hijos entre ellos...NUNCA.
No compares, a tu pareja actual, con la anterior, a tus padres con los padres de otros. En lo humano no vale la comparación. ¿que por que?, porque no existen dos seres humanos iguales, ni los gemelos idénticos pueden ser comparables, porque cada vida humana tiene cualidades diferentes, formas de apreciar el mundo diferentes maneras validas para cada quien. Porque tu experiencia y la mía son diferentes y al mismo tiempo ambas son valiosas, únicas, porque las experiencias componen nuestra vida.
Intenta JAMAS comparar tu existencia, tu vida con la de otro. Solo garantizaras sentir una punzada en el corazón, que llama a un dolor profundo y este a su vez a una serie de pensamientos que te gritarán..DETENTE!!, para lo que estas haciendo, no vale la pena que continúes realizando lo que haces , porque existe otro que lo hace mejor que tu, recuerda siempre existe alguien MUCHO, MUCHO, mejor que tu. Ese es el resultado cuando te comparas, detienes el desarrollo de tus cualidades, le dices stop a la risa, a la alegría, a la autenticidad, porque para ese momento ya te creíste que no lo podrás hacer mejor que este o aquel. En ese momento la tristeza te gritara, que tu existencia no vale como la del otro.
En esta navidad, NO TE COMPARES, no compares esta navidad con la anterior, disfruta esta que tienes al frente, la otra estuvo bien o mal, lo que sea, ahora tienes otra frente a ti, disfrútala o si estas triste pues también vale. Las reuniones familiares son especialmente tentadoras para entrar en cuadros de comparación, no caigas en ella, no compares a tus hijos y sus resultados con los de sus primos, intenta no comparar tus logros del año con los de tus hermanos o cuñados. De hacerlo se tornará en una navidad amarga, sin ganas de que llegue el año nuevo.
Hoy los pequeños que son quienes realmente hacen la navidad, te miran para ver que pasa contigo, realmente disfrutas como dices, o por estar en la permanente comparación te amargas.
A TODOS Y TODAS QUE TENGAN LA NAVIDAD MENOS COMPARABLE DE SUS VIDAS...QUE LA DISFRUTEN CON TODA LA AUTENTICIDAD POSIBLE.
Para cerrar les dejo esta hermosa canción de Cristina Aguilera que nos recuerda el efecto negativo de las palabras que comparan y la preciosa decisión de uno permitirlo.